El nuevo gobierno de Estados Unidos ha tomado una decisión significativa al cambiar oficialmente el nombre del Golfo de México a Golfo de América. Este cambio se enmarca dentro de una serie de medidas que buscan reafirmar el patrimonio y la identidad estadounidense.
Contexto del cambio
El anuncio fue realizado el 24 de enero de 2025, a través de un comunicado del Departamento del Interior. Esta medida se da en el marco de una orden ejecutiva del presidente Donald J. Trump, que también incluye el renombramiento del monte Denali en Alaska al monte McKinley. Según el comunicado, estos cambios buscan honrar el legado de la grandeza estadounidense y preservar el patrimonio nacional.
Detalles del anuncio
El Departamento del Interior destacó que el cambio de nombre del Golfo de México a Golfo de América reafirma el compromiso de la nación con su historia y su cultura. Se subrayó la importancia económica del golfo para Estados Unidos, indicando que su nueva denominación refleja su «importancia central para la nación».
Además, se mencionó que la Junta de Nombres Geográficos actualizará formalmente la nomenclatura federal en el Sistema de Información de Nombres Geográficos, haciendo efectivo el cambio de inmediato para uso federal.
Reacciones y críticas
La decisión ha generado diversas reacciones, especialmente en el contexto de las relaciones entre México y Estados Unidos. La presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, había rechazado anteriormente la propuesta de Trump, sugiriendo que Estados Unidos debería llamarse «América Mexicana». Este comentario, cargado de ironía, apunta a la larga historia de tensiones y disputas sobre el uso del término «América».
Significado del Renombramiento
El cambio de nombre del monte Denali a monte McKinley también ha sido objeto de atención. Se considera un homenaje al presidente William McKinley, quien lideró a Estados Unidos durante la guerra hispanoamericana y promovió un período de expansión territorial y crecimiento económico. Este cambio se presenta como un reconocimiento del legado de McKinley, especialmente después de que su nombre fuera eliminado de la nomenclatura federal durante la administración de Barack Obama en 2015.
Compromiso con el Patrimonio
El Departamento del Interior ha reafirmado su compromiso de respetar la orden ejecutiva del presidente Trump y garantizar que los nombres utilizados reflejen los valores y sacrificios que definen a la nación. Este enfoque busca asegurar que las futuras generaciones de estadounidenses celebren el legado de sus héroes y su historia.
El cambio del nombre del Golfo de México a Golfo de América es una decisión que refleja las prioridades de la nueva administración y su enfoque en la identidad nacional. A medida que se implementen estos cambios, se prevé que continúen las discusiones sobre el significado cultural y político de tales decisiones.
Fuente: Diario Las Americas
Foto: Tribuna Abierra