Una tragedia que sembró esperanza
En Nevada, EE. UU., Audrey Sullenger nació en 2023, pero su vida duró apenas seis días. Tras su muerte inesperada, su madre, Felicia Hill, decidió donar sus órganos. Esta decisión la convirtió en la donante infantil más joven del año en ese estado.
La urgencia de una vida en espera
A miles de kilómetros, en Vancouver, Canadá, Addison McArthur —recién nacida también— sufría una condición cardíaca grave y rara: miocardiopatía no compactada del ventrículo izquierdo, que afectaba la función de su corazón desde el nacimiento. Su única esperanza era recibir un trasplante urgente.
El trasplante que cambió el destino
Gracias a la generosidad de Felicia y la compatibilidad de los órganos, el corazón de Audrey fue trasladado a Canadá y trasplantado con éxito a Addison. El procedimiento fue realizado cuando la pequeña tenía apenas 11 semanas de vida. Desde entonces, el corazón de Audrey sigue latiendo, ahora en el pecho de otra niña.
El encuentro más emotivo
Un año después del trasplante, en un evento de concienciación sobre donación de órganos en California, las familias se conocieron por primera vez. Felicia, con un estetoscopio en la mano, pudo escuchar el corazón de su hija fallecida latiendo en Addison. Ambas madres compartieron lágrimas, abrazos y un momento que las unirá para siempre.
De la pérdida al activismo
Elaine Yong, madre de Addison, trabaja actualmente en BC Transplant —organismo de trasplantes de Columbia Británica— promoviendo la importancia de la donación de órganos infantiles. Junto con Felicia, ambas se convirtieron en activistas, educando al público sobre el poder de donar en vida o tras la muerte.
Addison, quien hoy tiene 14 años, ha disfrutado de una vida plena: ha nadado con manatíes, visto auroras boreales y participado de múltiples actividades que antes le hubieran sido imposibles sin el corazón de Audrey.
Una historia que cambia vidas
El caso de Audrey y Addison demuestra cómo un gesto de generosidad en medio del dolor puede tener un impacto profundo. Un solo donante puede salvar hasta ocho vidas y mejorar muchas más. En tiempos donde la empatía y la solidaridad parecen escasas, esta historia real nos recuerda el valor de la vida y del amor incondicional.
Fuentes
- https://www.infobae.com/america/mundo/2025/06/30/la-donacion-de-organos-de-un-bebe-une-para-siempre-a-dos-familias-y-permite-a-una-madre-escuchar-el-corazon-de-su-hija-fallecida/
- https://www.goodnewsnetwork.org/infants-organ-donation-creates-lifelong-connection-for-two-families-lets-mom-hear-her-late-daughters-heart/
- https://people.com/grieving-mom-saves-little-girls-life-after-donating-late-daughters-organs-11735063
- https://people.com/parents-hear-late-son-heartbeat-in-toddler-he-saved-exclusive-8426856
- https://www.theguardian.com/society/2024/dec/28/selfless-parents-gave-their-childs-organs-to-save-my-son-im-in-awe-of-them
