El Departamento de Policía de la Ciudad de Nueva York llevó a cabo una redada en Randall’s Island el miércoles, desmantelando un campamento de migrantes y confiscando automóviles, motocicletas y ciclomotores no registrados. Esta operación, descrita como estándar, se alinea con la postura del alcalde Eric Adams de no permitir campamentos fuera de los refugios ni en las calles de la ciudad.

El jefe de patrulla del Departamento de Policía de Nueva York, John Chell, explicó que el objetivo de la redada era buscar vehículos no registrados, ciclomotores y motocicletas robadas. Los líderes policiales describieron la acción como parte de una serie de operativos periódicos destinados a hacer cumplir la ley y combatir la delincuencia. “No nos importa tu estatus, estamos aquí para luchar contra el crimen, quienquiera que seas, dondequiera que pases el rato, dondequiera que vivas”, afirmó Chell.

La redada se produjo un día después de que el Ayuntamiento abordara los campamentos cercanos a los refugios para migrantes. Algunos inmigrantes informaron que no tenían otro lugar al cual ir después de alcanzar el límite de 30 días en los refugios. El campamento desmantelado había crecido notablemente frente a las puertas del refugio.

Durante un día de verano, el campamento era visible con gente viviendo y trabajando allí, realizando actividades como cortar el cabello, y con restos de basura típicos de grandes reuniones. La ubicación estaba cerca de un puente peatonal que conectaba con el resto de la ciudad.

Desde hace dos años, más de 200,000 inmigrantes han llegado a la ciudad. La policía subraya que el propósito de la redada no es discriminar a las personas por su estatus migratorio, sino combatir la delincuencia. El alcalde Eric Adams también destacó la importancia de contar con autorización de trabajo adecuada para que los inmigrantes puedan mantenerse legalmente.