Migrantes denuncian abandono del INM y buscan nuevas opciones
La caravana migrante «Hijos de Dios» modificó su trayecto y abandonó su ruta hacia Veracruz, dirigiéndose ahora a la capital de Oaxaca. Su líder, Miguel Ocampo, señaló que esta decisión responde a la falta de respuesta del Instituto Nacional de Migración (INM) sobre la solicitud de autobuses que les permitan avanzar de forma más segura hacia la Ciudad de México. Más de 1.500 migrantes buscan regularizarse mediante la plataforma CBP One, con el objetivo final de llegar a Estados Unidos.

Riesgos de la nueva ruta hacia Oaxaca
La nueva ruta, que atraviesa el Istmo de Tehuantepec, es considerada una de las más peligrosas debido a sus curvas pronunciadas y el constante tránsito de vehículos de carga. Los 270 kilómetros que separan a los migrantes de Oaxaca representan un riesgo significativo para su integridad. A pesar del temor, los integrantes de la caravana se mantienen firmes. «Estamos arriesgando nuestras vidas, pero sabemos que vamos a lograrlo», afirmó uno de ellos.

Desconfianza ante las estrategias de desarticulación del INM
Miguel Ocampo expresó su preocupación por las estrategias del INM para desarticular caravanas antes de que lleguen a Oaxaca. Aseguró que su grupo no caerá en estos intentos y lamentó la falta de apoyo de las autoridades de derechos humanos. «Hemos sido firmes y aquí seguimos», reiteró.

La meta: llegar antes de enero a la frontera norte
La caravana tiene en mente llegar a la frontera norte antes de enero, con la intención de cruzar a Estados Unidos antes de que Donald Trump asuma nuevamente el poder. Los migrantes consideran que las políticas del expresidente podrían soportar aún más el acceso al territorio estadounidense.