El metro de Nueva York está introduciendo un nuevo enfoque para mejorar la seguridad de sus pasajeros mediante la implementación de sensores equipados con inteligencia artificial para detectar armas. Aunque los niveles de criminalidad han disminuido en general, los incidentes en el metro han aumentado en un 13%, lo que ha llevado a la adopción de medidas más innovadoras para abordar esta preocupación.

Anteriormente, el metro de Nueva York experimentó problemas de seguridad significativos, pero se produjo una transformación en la década de 1990 con iniciativas de limpieza y control más estricto. Ahora, se está utilizando tecnología de vanguardia, como la desarrollada por la compañía Evolv, para detectar armas de manera no intrusiva y eficiente.

La tecnología de Evolv utiliza campos electromagnéticos de frecuencia ultrabaja y algoritmos de inteligencia artificial para analizar formas, tamaños y materiales, identificando posibles amenazas sin afectar la salud de los usuarios. Esta solución ofrece una alternativa más ágil y precisa en comparación con los métodos tradicionales de detección de armas.

Aunque la implementación de estos sensores no garantiza una seguridad total, representa un paso importante para limitar el acceso de armas en espacios públicos, como el metro de Nueva York, donde la prevención de la violencia armada es una prioridad. Este enfoque se suma a otras iniciativas destinadas a abordar la delincuencia y mejorar la experiencia general de los pasajeros en el sistema de transporte subterráneo.