22/07/24 – 8:35 A.M
El Papa Francisco ha señalado la importancia de una fe auténtica y profunda, criticando a aquellos católicos que practican una religiosidad «de fachada». En su mensaje, el Sumo Pontífice insta a los fieles a aprender a mirar con misericordia a los demás y a reconocer sus propios pecados para volver a la alianza con Dios.
Durante la Misa, la celebración más importante de la religión católica, los cristianos se congregan para adorar a Dios, reflexionar sobre su fe y fortalecer su relación con Cristo. Aunque la Misa se celebra con mayor frecuencia los domingos, en muchas comunidades también se realiza durante la semana. Por ello, el Vaticano actualiza diariamente las lecturas y el evangelio.
Lectura de este viernes, 19 de julio Isaías 38, 1-6. 21-22. 7-8
El rey Ezequías, gravemente enfermo, recibe la visita del profeta Isaías, quien le dice que debe arreglar sus asuntos porque no se recuperará. Ezequías ora a Dios, recordándole su fidelidad, y Dios, conmovido por sus lágrimas, decide prolongar su vida quince años más y proteger Jerusalén del rey de Asiria. Isaías indica un tratamiento para su enfermedad y proporciona una señal milagrosa de la promesa de Dios.
Evangelio del día Mateo 12, 1-8
Jesús y sus discípulos atraviesan un sembrado un sábado, y los discípulos, hambrientos, comen espigas. Los fariseos los acusan de violar el sábado, pero Jesús les recuerda que David y sus compañeros comieron los panes consagrados y que los sacerdotes trabajan en el templo en sábado sin pecar. Jesús enfatiza que la misericordia es más valiosa que los sacrificios rituales y declara que el Hijo del hombre es dueño del sábado.
Mensaje del Papa Francisco para este día
El Papa Francisco interpreta las palabras de Jesús y del profeta Oseas como un llamado a una fe genuina y profunda, más allá de una religiosidad superficial. Jesús cita al profeta Oseas para enfatizar que Dios valora más la misericordia y la lealtad del corazón que los sacrificios rituales.
«A pesar de la alianza de Dios y la misericordia, el pueblo de Israel vivía frecuentemente con una religiosidad ‘de fachada’, sin vivir en profundidad el mandamiento del Señor. Es por eso que el profeta insiste: ‘misericordia quiero’, es decir la lealtad de un corazón que reconoce los propios pecados, que se arrepiente y vuelve a ser fiel a la alianza con Dios», destaca el Sumo Pontífice.
Por ello, el Papa señala que hay que «aprender a mirar con misericordia a los demás (…)». Según considera, «somos todos discípulos que tienen necesidad de experimentar y vivir la palabra consoladora de Jesús». Y añade que «tenemos necesidad de nutrirnos de la misericordia de Dios, porque es de esta fuente que brota nuestra salvación».
Fuente: El Cronista
Foto: Unsplash-Wikipedia