Expertos de la ONU confirmaron que el misil balístico utilizado en el ataque a la ciudad ucraniana de Kharkiv el 2 de enero fue de fabricación norcoreana, lo que viola el embargo de armas impuesto a Corea del Norte.

Los restos del misil que cayó en Kharkiv fueron identificados como pertenecientes a un misil de la serie Hwasong-11 de Corea del Norte, según informaron los supervisores de sanciones de la ONU en un informe al Consejo de Seguridad.

El informe también señaló que no se encontraron pruebas de que el misil fuera de fabricación rusa, y aunque no se pudo identificar su punto de lanzamiento, las autoridades ucranianas indicaron que fue lanzado desde territorio ruso.

Las acusaciones de transferencia de armas entre Corea del Norte y Rusia han sido objeto de disputa, con Estados Unidos y otros países señalando a Corea del Norte como proveedor de armamento utilizado por Rusia en el conflicto ucraniano.

El fiscal general de Ucrania confirmó la utilización de misiles norcoreanos por parte del Ejército ruso en territorio ucraniano, aunque se están llevando a cabo investigaciones adicionales para verificar estos resultados y determinar el origen de otros misiles utilizados en los ataques.