El FBI ha informado recientemente a Kash Patel, la controvertida elección de Donald Trump para dirigir la agencia, sobre un ciberataque presuntamente respaldado por Irán. Dos altos funcionarios de seguridad confirmaron la existencia de este incidente, que buscaría comprometer las comunicaciones personales de Patel.

El ataque ocurrió antes de la nominación de Patel como director del FBI, aunque aún no está claro si los hackers lograron acceder a información sensible o el alcance del posible robo de datos. La investigación continúa en curso, con el FBI manteniendo hermetismo sobre los detalles.

Este incidente se suma a una serie de intentos previos de interferencia cibernética. En septiembre, tres agentes iraníes fueron acusados de un ataque contra la campaña presidencial de Trump, con el aparente objetivo de socavar el proceso electoral estadounidense. Los presuntos responsables, miembros de la Guardia Revolucionaria Islámica, habrían intentado robar y distribuir información confidencial.

Alex Pfeiffer, portavoz de la transición de Trump, defendió a Patel como una pieza clave contra el régimen iraní y potencial implementador de políticas de protección nacional. Sin embargo, la nominación de Patel como director del FBI enfrenta desafíos significativos, requiriendo la confirmación del Senado y potencialmente la remoción de Christopher Wray, quien actualmente tiene un mandato hasta 2027.

El contexto político se complica con intentos previos de interferencia, como el envío no solicitado de información robada a contactos de la campaña de Biden, aunque sin evidencia de respuesta por parte de los destinatarios.

El incidente destaca la continua tensión entre Estados Unidos e Irán, revelando los complejos desafíos de seguridad cibernética en el panorama geopolítico actual. La amenaza ilustra la fragilidad de los sistemas de comunicación gubernamentales y los riesgos constantes de intervención extranjera.

Fuente: Kash Patel, elegido por Trump para director del FBI, fue blanco de un ciberataque respaldado por Irán