El comandante de la Policía Nacional, Carlos Benítez, declaró que no está en condiciones de confirmar ni desmentir si los primeros disparos durante el allanamiento que resultó en la muerte del diputado Eulalio Lalo Gomes provinieron desde el interior de su habitación. La declaración fue dada antes de una sesión reservada en el Senado.

Benítez señaló que la posición oficial de la Policía es que los disparos vinieron desde dentro de la habitación, basándose en el testimonio de los agentes involucrados en el operativo. Sin embargo, aclaró que no puede afirmar ni negar esto de manera definitiva, ya que la investigación está en manos del Ministerio Público.

El comandante enfatizó que sería irresponsable hacer afirmaciones sin esperar los resultados de la investigación y reiteró que toda la información es preliminar. Cuando se le preguntó si pudo haber un error en el procedimiento, Benítez se mantuvo neutral, insistiendo en que no puede emitir un juicio hasta que la investigación concluya.

Benítez también comentó que, aunque la Policía tiene información extraoficial sobre impactos provenientes del interior de la habitación, cualquier confirmación deberá esperar. La Criminalística encontró cinco armas en la residencia de Gomes, incluyendo una pistola calibre 9 mm que supuestamente estaba en su poder.

Respecto a las especulaciones de una posible «quema de archivo» y la participación de agentes extranjeros, Benítez desmintió esas versiones, asegurando que sólo participaron policías paraguayos y fiscales.

Actualmente, 22 agentes de la Policía están bajo investigación por Asuntos Internos en relación con este caso. De ellos, 12 pertenecen a la Fuerza de Operaciones Policiales Especiales (FOPE) y 10 a la Unidad de Investigación Sensible (SIU). Ninguno ha sido arrestado hasta el momento.

Sobre la reciente resolución de la Cámara de Diputados que exige su renuncia, Benítez expresó respeto por la decisión, aunque aclaró que dentro de la Policía no existe la figura de renuncia, solo pase a retiro, disponibilidad o baja.