Estados Unidos está dando un paso significativo al incorporar inteligencia artificial (IA) en sus sistemas de armamento con el objetivo de mejorar su eficacia. La IA se está convirtiendo en una herramienta esencial en varios ámbitos, y el sector militar no es la excepción.

La inteligencia artificial en sistemas de armas ya es una realidad en la actualidad. En años recientes, diferentes países han avanzado en esta tecnología, la cual podría marcar un nuevo hito en la carrera armamentística global. Por ejemplo, China ha desarrollado drones capaces de comunicarse entre sí. Ahora, EE.UU. ha decidido implementar IA en sus sistemas de armamento y ha adjudicado un contrato millonario para este propósito.

La IA se está integrando de manera rápida en nuestra vida diaria. Desde chatbots y modelos de lenguaje gratuitos hasta sistemas avanzados desarrollados por grandes compañías como Google, OpenAI, Apple y figuras como Elon Musk, la inteligencia artificial está revolucionando la resolución de problemas actuales.

En este contexto, Estados Unidos ha destinado 480 millones de dólares para avanzar en la inteligencia artificial militar. A pesar de que ambos países, China y EE.UU., acordaron previamente no aplicar esta tecnología en armamento, parece que dicho acuerdo no ha tenido mucho impacto. Según un comunicado del Departamento de Defensa de EE.UU., el país ha otorgado un contrato de 480 millones de dólares a la empresa Palantir para colaborar con el Ejército de EE.UU. en la mejora de sus capacidades basadas en IA.

El contrato con Palantir tiene como objetivo desarrollar y mejorar la herramienta Maven Smart System del Ejército. Este sistema basado en IA tiene la finalidad de analizar el campo de batalla para optimizar las operaciones militares, con la expectativa de que el prototipo pueda ser probado en mayo de 2029. Sin embargo, aún queda por ver si el proyecto cumplirá con las expectativas.

Aunque el Ejército de EE.UU. celebra este avance, la aplicación de la IA en el ámbito militar presenta riesgos. El acuerdo previo entre EE.UU. y China para no invertir en este tipo de tecnología ya indicaba la preocupación en torno a estos desarrollos. Los posibles peligros incluyen la falta de precisión y la incapacidad para analizar adecuadamente diversas situaciones, lo cual podría resultar en la pérdida de vidas inocentes. Estaremos atentos a las actualizaciones de Palantir sobre este tema.