El Megapuerto de Chancay, situado a 80 kilómetros al norte de Lima, Perú, se consolida como una infraestructura clave para el comercio entre América Latina y Asia. Con una inversión de aproximadamente 3.500 millones de dólares, liderada por la empresa china COSCO Shipping Ports, este proyecto promete transformar la dinámica logística y económica de la región.
Características Técnicas y Operativas
El puerto cuenta con una profundidad natural de 17,8 metros, permitiendo el atraque de los buques más grandes del mundo. En su primera fase, operará con cuatro muelles y se espera que maneje hasta un millón de contenedores anuales. Además, incorpora un túnel subterráneo de 1,8 kilómetros que conecta directamente con la Panamericana Norte, facilitando el tránsito de carga sin afectar las áreas urbanas.
Impacto Económico y Comercial
Según el Banco Central de Reserva del Perú, se estima que el megapuerto contribuirá con hasta 0,9 puntos porcentuales al Producto Bruto Interno en 2025. A la fecha, ha generado más de 420 millones de dólares en operaciones de comercio exterior. Además, se proyecta la creación de aproximadamente 8.000 empleos directos e indirectos, revitalizando la economía local y nacional.
Conectividad y Desarrollo Regional
El puerto está estratégicamente ubicado para servir como un nodo logístico que conecta diversas regiones del Perú, incluyendo la costa norte y la Amazonía. Se están planificando infraestructuras complementarias, como carreteras y zonas económicas especiales, para maximizar su potencial.
Desafíos Ambientales y Sociales
A pesar de sus beneficios económicos, el proyecto ha generado preocupaciones entre las comunidades locales. Organizaciones ciudadanas han señalado impactos negativos en la pesca artesanal y en ecosistemas sensibles, como el Humedal Santa Rosa. Además, se han reportado afectaciones a viviendas y patrimonio arqueológico debido a las obras de construcción.
Implicaciones Geopolíticas
La participación mayoritaria de COSCO Shipping Ports, con un 60% de las acciones, ha suscitado debates sobre la creciente influencia de China en la región. Estados Unidos ha expresado preocupaciones sobre el potencial uso dual del puerto, tanto comercial como militar. Sin embargo, representantes chinos han negado tales intenciones, enfatizando el carácter exclusivamente comercial del proyecto.
El Megapuerto de Chancay representa una oportunidad significativa para Perú y América Latina en términos de comercio internacional y desarrollo económico. No obstante, es crucial abordar los desafíos sociales, ambientales y geopolíticos asociados, asegurando que los beneficios del proyecto se distribuyan equitativamente y se respeten los derechos y necesidades de las comunidades locales.
