A partir de diciembre de 2023, Google ha implementado una política que podría resultar en la eliminación de cuentas que permanezcan inactivas durante dos años. Esta medida afectará a millones de usuarios, quienes podrían perder acceso a servicios esenciales como Gmail, YouTube y Google Drive, así como a la información almacenada en ellos. La compañía busca optimizar la gestión de sus recursos y reducir costos operativos mediante la eliminación de cuentas que ya no se utilizan.

Para evitar que una cuenta sea eliminada, Google sugiere realizar actividades sencillas que mantengan la cuenta activa, como iniciar sesión, enviar correos electrónicos, ver videos en YouTube, o interactuar con archivos en Google Drive. Es importante destacar que las cuentas pertenecientes a organizaciones, así como aquellas con contenido activo en YouTube, no se verán afectadas por esta nueva normativa.

Google ha asegurado que los usuarios recibirán notificaciones con meses de anticipación antes de que una cuenta sea eliminada, lo que les dará tiempo suficiente para reactivarla si es necesario. Esta política ha generado diversas reacciones, con algunos usuarios preocupados por la posibilidad de perder el acceso a cuentas secundarias que utilizan con menos frecuencia.