12/06/24 – 13:21 P.M
Félix Herrera García se declaró culpable de cargos de narcóticos tras ser extraditado a Nueva York desde México.
Herrera, de 35 años, fue arrestado en Sinaloa y extraditado debido a la muerte de un bebé de un año que sufrió exposición al fentanilo en una guardería del Bronx.
Herrera es el esposo de Grei Méndez, dueña de la guardería donde ocurrió la tragedia, y su culpabilidad sigue a la de Renny Antonio Parra Paredes.
Méndez, también acusada, junto a otros cómplices, dirigía la guardería “El Divino Niño” donde se almacenaban y distribuían drogas.
Parra Paredes, alias “El Gallo”, se declaró culpable de conspirar para distribuir narcóticos.
Ambos hombres enfrentan penas mínimas obligatorias de 20 años y máximas de cadena perpetua por sus crímenes.
Herrera y Parra Paredes empaquetaban y distribuían fentanilo, heroína y otros opioides sintéticos en la guardería.
La red de narcotraficantes escondía más de 10 kilogramos de estupefacientes en compartimentos ocultos, poniendo en riesgo a los niños presentes.
El bebé Nicholas Feliz Dominici murió por exposición al fentanilo y otros dos niños fueron hospitalizados pero sobrevivieron gracias a Narcan.
Los niños fueron encontrados inconscientes en la guardería, destacando el peligro de mezclar narcotráfico con lugares destinados a ser seguros para los pequeños.
La DEA descubrió otra fábrica de fentanilo cerca de una guardería en Belmont, El Bronx, poco después de la tragedia.
Esto subraya la creciente problemática del fentanilo en Nueva York, exacerbada por su alta letalidad y frecuente aparición en sobredosis.
El fentanilo, 50 veces más fuerte que la heroína, ha incrementado significativamente las muertes por sobredosis en Nueva York.
La DEA y las autoridades de salud pública continúan luchando contra esta crisis, que resulta en una sobredosis cada tres horas en la ciudad.
Fuente: EL DIARIO
Foto: Unsplash