En una sesión extraordinaria, la Cámara de Senadores aprobó el proyecto de ley antinepotismo, que había recibido media sanción de la Cámara de Diputados el pasado 20 de marzo. La propuesta, impulsada por la bancada del movimiento Honor Colorado (HC), fue ratificada sin modificaciones, a pesar de las cuatro propuestas diferentes que figuraban en el orden del día, incluyendo la iniciativa popular «Chau Nepotismo».

El documento aprobado define el nepotismo como la utilización de influencia para nombrar o contratar en cargos públicos, estipulando como sanción la inhabilitación por cinco años para ocupar funciones públicas, la nulidad del acto jurídico, y la devolución de salarios cobrados indebidamente por parte del autor y del beneficiado.

Debate y Rechazo a Modificaciones:
El líder de la bancada cartista, el senador Natalicio Chase, propuso debatir únicamente las modificaciones de cada artículo del proyecto de ley. Sin embargo, durante la sesión, la mayoría cartista se impuso en cada artículo, ratificando la versión aprobada previamente por la Cámara Baja.

El oficialismo rechazó todas las propuestas de cambio, a pesar de haber sido consensuadas entre las comisiones de Legislación y Asuntos Constitucionales. De este modo, las modificaciones presentadas en las otras tres propuestas, incluida la iniciativa popular «Chau Nepotismo», quedaron completamente descartadas.

Iniciativa Popular Desestimada:
La iniciativa popular «Chau Nepotismo» contaba con el respaldo de 48,300 firmas ciudadanas, cumpliendo con los requisitos establecidos por la ley. Sin embargo, no fue tenida en cuenta en la aprobación final del proyecto de ley.

La aprobación de la ley antinepotismo en su versión original, sin modificaciones y sin considerar la iniciativa popular, ha generado descontento entre los ciudadanos que apoyaron «Chau Nepotismo». La falta de consenso y la imposición de la mayoría cartista en el Senado reflejan las dificultades para incorporar la voz de la ciudadanía en la legislación contra el nepotismo.