En un análisis revelador, la consultora SemiAnalysis ha confirmado que China cuenta con los chips de inteligencia artificial (IA) necesarios para satisfacer todas sus demandas, desafiando las sanciones impuestas por Estados Unidos. A pesar de las restricciones establecidas por la administración estadounidense desde octubre de 2022, que buscan frenar la capacidad de China para producir circuitos integrados avanzados y acceder a los chips más sofisticados de empresas como NVIDIA, Intel y AMD, la situación ha tomado un giro inesperado.

Huawei, gigante tecnológico chino, está desempeñando un papel crucial en este escenario. La compañía ha comenzado a suministrar muestras de su GPU Ascend 910C a empresas tecnológicas locales que buscan alternativas al hardware de NVIDIA. Este nuevo chip, una versión mejorada del Ascend 910B, se promociona como una opción potente, comparable al aclamado A100 de NVIDIA.

A pesar de las dificultades, las empresas chinas han encontrado formas de eludir las sanciones. Las GPU avanzadas de IA continúan fluyendo hacia el país a través de mercados intermedios en India, Malasia y Singapur, aunque a precios más elevados. Sin embargo, en la actual coyuntura, los fabricantes en China están dispuestos a invertir más para obtener estos semiconductores de alta gama.

El informe de SemiAnalysis destaca que, si el Gobierno chino lo decide, podría establecer el mayor centro de datos para el entrenamiento de modelos de IA del mundo en un instante. Esta capacidad subraya la firme intención de China de convertirse en un líder en la industria de la inteligencia artificial.

En otro desarrollo, ByteDance, la empresa matriz de TikTok, ha anunciado su intención de entrenar un nuevo modelo de IA utilizando chips de Huawei, evidenciando el creciente interés de las empresas tecnológicas chinas en estas soluciones locales. Eric Xu Zhijun, presidente rotativo de Huawei, ha enfatizado que su compañía ha establecido dos nuevas divisiones en los últimos cinco años para adaptarse a las necesidades del mercado de IA, mientras señala que es poco probable que las restricciones de EE.UU. se levanten pronto. Esto ha creado una ventana de oportunidad para que Huawei ofrezca recursos de computación en la nube a las empresas chinas.

Con esta serie de movimientos estratégicos, China no solo está desafiando las restricciones internacionales, sino que también está avanzando rápidamente en su objetivo de convertirse en un referente global en el campo de la inteligencia artificial.