La migración de mexicanos hacia Estados Unidos ha mostrado un aumento notable, destacando el flujo de familias completas por encima de otras nacionalidades y formas de migración, señaló Tonatiuh Guillén López, investigador del Programa Universitario de Estudios del Desarrollo de la UNAM.

Durante su participación en el ciclo “Tienes una C.I.T.A. Ciencia, Innovación, Tecnología, Academia en el C3 con la Academia Mexicana de Ciencias”, Guillén López destacó que la movilidad de familias mexicanas ha superado a la de adultos solos. El también expresidente de El Colegio de la Frontera Norte atribuyó este éxodo dramático a factores como la pandemia y las violencias ejercidas por el crimen organizado, lo que ha deteriorado el Estado de derecho en México.

Según las cifras presentadas por Guillén López, en octubre de 2017 se registraron aproximadamente mil personas mexicanas agrupadas en familias en la frontera sur de Estados Unidos. Para julio de 2022, esta cifra superó las cinco mil personas, y en noviembre y diciembre de 2023 casi alcanzaron las 40 mil, superando incluso a los adultos solos, que fueron alrededor de 29 mil.

En su exposición en el Centro de Ciencias de la Complejidad, el investigador señaló que desde abril de 2021, también se ha observado un incremento en la migración hacia la frontera sur de Estados Unidos de países como Cuba, Nicaragua y Venezuela. En particular, Cuba registró un pico de 43 mil personas entre diciembre de 2022 y enero de 2023, mientras que Nicaragua alcanzó 35 mil migrantes en ese mismo periodo y Venezuela llegó a aproximadamente 66 mil personas en agosto de 2023.

Guillén López realizó una clasificación de las épocas de movilidad regional hacia Estados Unidos. Identificó 2008 y años anteriores como la Época Clásica, caracterizada por la migración mexicana de adultos solos. La Época Centroamericana (2009-2020) se distinguió por un declive en la movilidad mexicana y un aumento en el flujo de migrantes centroamericanos. Finalmente, la actual Época Pos-COVID (2021-2024) muestra un repunte en la migración mexicana y un crecimiento relativo del flujo de solicitantes de refugio de América Central.

El investigador concluyó que se ha intentado invisibilizar la movilidad mexicana, aunque este fenómeno está en expansión tanto en familias como en adultos solos.